Examen de hormona paratiroidea en la sangre
El PTH es una hormona proteica, secretada por la glándula paratiroides; su examen mide la cantidad de la hormona naratiroidea en la sangre. Desde el Servicio de Laboratorio de Clínica Pueyrredon, explican que en los casos de urgencia, se pueden obtener los resultados en 2hs.
Las 4 pequeñas glándulas paratiroides están localizadas en el cuello, cerca de o adheridas al lado posterior de la glándula tiroides. La glándula tiroides está localizada en el cuello, justo arriba del lugar en el que las clavículas se juntan. La PTH, secretada por las glándulas paratiroides, controla los niveles de calcio, fósforo y vitamina D en la sangre. Su importancia se debe a su función de regular el crecimiento de los huesos.
El profesional médico puede solicitar un examen de hormona paratiroidea si:
-Usted tiene un nivel alto de calcio o un nivel bajo de fósforo en la sangre.
-Tiene osteoporosis grave que no se puede explicar o no responde al tratamiento.
-Tiene enfermedad renal.
Para ayudar a entender si su PTH es normal, el médico evaluará también el calcio en la sangre al mismo tiempo.
Significado de los resultados anormales
Un nivel de la hormona paratiroidea por encima de lo normal puede presentarse con:
-Trastornos que aumentan los niveles de fósforo o fosfato en la sangre, tales como una enfermedad renal prolongada (crónica).
-Insuficiencia del organismo para responder a la PTH (seudohipoparatiroidismo).
-Falta de calcio, que puede deberse a no consumir suficiente calcio, no absorberlo en el intestino o perder demasiado calcio en la orina.
-Embarazo o lactancia (poco común)
-Hinchazón de las glándulas paratiroides, llamada hiperparatiroidismo primario.
-Tumores en la glándula paratiroides, llamados adenomas.
-Trastornos de la vitamina D, entre ellos insuficiente luz solar en adultos mayores y problemas para absorber, descomponer y usar la vitamina D en el cuerpo.
Un nivel por debajo de lo normal puede ocurrir con:
-Extirpación accidental de las glándulas paratiroides durante una cirugía de cuello.
-Destrucción autoinmunitaria de la glándula paratiroides.
-Cánceres que comienzan en otra parte del cuerpo (como la mama, los pulmones o el colon) y se propagan al hueso.
-Exceso de calcio durante un largo periodo de tiempo, generalmente por exceso de suplementos de calcio o ciertos antiácidos que contienen carbonato de calcio o bicarbonato sódico (bicarbonato de sodio).
-Glándulas paratiroides que no producen suficiente PTH (hipoparatiroidismo).
-Bajos niveles de magnesio en la sangre.
-Radiación a las glándulas paratiroides.
-Sarcoidosis y tuberculosis.
-Ingesta excesiva de vitamina D.