Se realizó con éxito el primer trasplante hepático del año
El Servicio de Trasplante Hepático de la Clínica, realizó el trasplante número 37. En esta oportunidad, el receptor fue un hombre de 60 años, que tenía una enfermedad en el hígado y tumores hepáticos.
Toda la operación estuvo a cargo del Dr. Diego Fernández, junto al Dr. Federico García, y todo el equipo de Trasplante Hepático. El operativo incluyó un viaje a Río Negro en avión sanitario para hacer la extracción del órgano del donante y volver inmediatamente a Mar del Plata.
Para el equipo médico que hizo el trasplante será parte de las anécdotas de una nueva operación exitosa.”Entre tanta mala noticia, esta es una buena en el sistema de salud de Mar del Plata”, resumió Diego Fernández, para el Diario La Capital Mar del Plata.
El grupo de trabajo estuvo compuesto por más de 40 personas y el resultado de la operación fue satisfactorio: el paciente se recupera favorablemente.
“Uno está con una tensión enorme. Son 24 horas casi sin pestañear y cuando las cosas, más allá de que todo no depende de nosotros, funcionan y el paciente anda bien y empieza a aceptar el órgano, es una alegría y algo que empuja a seguir adelante”, reflexiona Fernández.
La pandemia
El especialista puntualizó en el impacto que tuvo la pandemia en los trasplantes. “El mantenimiento de los donantes que surgen es mucho más difícil. Un donante ocupa un respirador y una cama de terapia, espacios que hoy están ocupados por Covid”, contó y añadió que “no sólo se dificulta la donación de órganos sino el implante en los pacientes”.
Para ejemplificar, se refirió al procedimiento realizado recientemente y admitió que anteriormente tuvieron que rechazar la oportunidad de hacer el transplante porque “no había cama en terapia, debido la tensión del sistema sanitario”.
Pioneros
En Mar del Plata, en abril del año pasado se realizó el primer trasplante del país en la pandemia. “Fuimos los pioneros en arrancar con trasplantes. Hoy estamos en una situación mucho más difícil, más que nada por la tensión del sistema de salud que está todo ocupado”, comparó.
En referencia a los primeros meses de la pandemia, sostuvo: “Si lo analizamos ahora, el año pasado después de la cuarentena estricta, fue más sencillo: estaban la clínicas vacías y no había casos de Covid en Mar del Plata”.
Fernández explicó que a pesar de que la donación de órganos “se complicó bastante”, se logró mantener cierta actividad. “Por supuesto que bajamos a niveles mucho menores a los de los últimos años, pero mantener una actividad en todo el país, es bueno para seguir activos”, contó.
No obstante, el final del año pasado no resultó nada sencillo para el equipo. A las dificultades propias de los efectos de pandemia como contagios y aislamientos del personal de salud, se sumó el fallecimiento del cirujano Ricardo Bracco.
“Era el alma mater del equipo y fue un golpe fuerte a fin del año pasado”, describe Fernández.
“Tuvimos grandes dificultades por el Covid y por la pérdida física de gran parte del nuestro equipo. Sufrimos muchas bajas, aislamientos por Covid, perdimos un referente del equipo lo cual anímicamente tuvo un impacto fuerte. Ahora nos estamos recuperando, y de a poco volvemos a activar nuestro funcionamiento”, profundizó.
Por último, el doctor Fernández no ocultó su satisfacción por haber concretado el trasplante en un contexto muy adverso y dejó un mensaje esperanzador.
“A pesar de todas las dificultades sanitarias que estamos teniendo, desde todo punto de vista, y todo lo económico que impacta enormemente, el deterioro de lo sanitario, el sistema sigue haciendo un esfuerzo por dar salud. Por promulgar la donación de órganos y por dar trasplante a los que lo necesiten”, cerró.