12/07 - Interés para la salud

Enfermedades de invierno más comunes en los niños

Las enfermedades respiratorias son las que más se incrementan en épocas de mucho frío y afectan principalmente a los más chicos. Él sistema inmunológico de los niños no es aún maduro como el de los adultos, esto los hace especialmente vulnerables a las bajas temperaturas.

 

Desde el Servicio de Pediatría indican que las enfermedades más frecuentes asociadas al invierno son:

Bronquiolitis

La bronquiolitis es una inflamación aguda de las vías aéreas inferiores (bronquiolos). Es la enfermedad más frecuente en los niños, y en general afecta más a los menores de un año.  El diagnóstico es clínico y el tratamiento ambulatorio. 

 

Comienza con un cuadro de secreción de moco, no siempre hay fiebre, da la sensación de que el pequeño fuera a resfriarse. A los tres días de haber comenzado el cuadro aparece agitación, tos y en algunos casos hay dificultad para alimentarse o dormir. 

 

Lo más importante en cuanto al tratamiento son las medidas de sostén: mantener al bebé en una posición semi sentada, extraer la secreción de mocos de la nariz, brindarle una alimentación más fraccionada (menor cantidad de comida, pero ofrecerle mayor cantidad de veces), bajar la temperatura con antitérmicos si tiene fiebre. 

 

Uno de los medicamentos que se utilizan es el Salbutamol para ayudar a la broncodilatación. Es decir, que el bronquio este más dilatado para que pueda, por medio de la tos, expectorar la secreción de mocos. 

 

La causa más frecuente de la bronquiolitis es viral, y el virus más común es el sincicial respiratorio. 

 

El periodo de duración es entre una semana y diez días. Una vez que pasa el periodo agudo puede quedar una tos residual de hasta 14 días. Lo que más suele preocupar a los padres es la tos, pero es importante entender que, a pesar de que es molesta, es lo que más ayuda a los niños a mejorar el cuadro.

 

Concurrir a la guardería y no ser amamantado los primeros meses de vida son factores de riesgo.

 

Gripe

Es una enfermedad viral respiratoria muy contagiosa. El tratamiento es en forma asintomática, consiste en mucha ingesta de líquidos y antitérmicos si tiene fiebre.

 

La gripe puede dar fiebre alta, cefaleas, ganas de vomitar o náuseas, y mucho dolor corporal. Los estados gripales no se caracterizan por tener tanta congestión nasal como en un resfrío.

 

Como medida de prevención tenemos la  vacuna antigripal que se aplica todos los años a los menores de 2 años y mayores de 65 años. Y entre los 2 a 65 años se indica si están dentro de los grupos de riesgo. También se aplica en embarazadas y puérperas. Lo ideal es aplicarla en el otoño, ya que tarda entre 2 y 3 semanas en formar anticuerpos.  

 

Faringitis

Es la inflamación de la garganta o faringe a menudo causada por una infección bacteriana o vírica. En su mayoría, sobre todo en los menores de 2 años, es causada por cuadros víricos. En todas las edades predominan los virus, pero entre los 2 y los 15 años empiezan a aparecer algunas bacterias. Para saber cuál es la causa se hace un hisopado de fauces, y en base a eso se determina si se utilizan antibióticos o no.

 

Es importante establecer si la causa es vírica o bacteriana, ya que una faringitis bacteriana no tratada a tiempo trae complicaciones, como por ejemplo la fiebre reumática o la glomerulonefritis, que son problemas a distancia muy graves. 

 

Clínicamente los cuadros de faringitis vírica o bacteriana son idénticos. Los síntomas incluyen fiebre, garganta roja, dolor de garganta. Como dolor reflejo puede haber dolor de oído. También puede haber dolor abdominal y vómitos. 

 

Es muy común en los más chicos la herpangina, que es una enfermedad viral que se caracteriza por la garganta muy roja y con vesículas, que son pequeñas ampollitas de agua que duelen mucho. Suele dar fiebre muy alta, y a veces presentan moco, diarrea y una conjuntivitis asociada. 

 

Otitis

La otitis es una inflamación del oído causada, generalmente, por una infección. El tipo más común de esta afección es la denominada otitis media y está provocada por la inflamación del oído medio, que se encuentra en la parte posterior del tímpano.

 

Las otitis del oído medio son las que más vemos en invierno y, en general,  vienen precedidas por un cuadro de vías aéreas superior. Empiezan con moco, resfrío, fiebre, y hay algo de dolor de oído. 

 

Se tratan generalmente en forma asintomática, solo con analgésicos para manejar el dolor. Pero en los casos que tienen secreción purulenta si se utilizan antibióticos. 

 

Las otitis del oído medio en su gran mayoría son bacterianas.