A lo largo de estos 75 años, la Clínica ha contado con el trabajo y el apoyo de todos sus empleados, quienes se han “puesto la camiseta” y lograron que hoy en días ea una de las Instituciones más reconocidas de la ciudad, no solo por su profesionalismo sino por la calidad humana de las personas que la conforman.

Seis de ellos nos cuentan: ¿Qué significa ser parte de Clínica Pueyrredon?

Natalia Herrera – Supervisora de mucamas

Hace 13 años que trabajo acá y estoy muy contenta. Empecé como mucama, ya hace casi 3 años que estoy como supervisora de mucamas. Estoy muy agradecida a la clínica porque pude progresar muchísimo gracias a la oportunidad que me dieron acá adentro.

Romina D´angelo, enfermera de Terapia Intensiva

Hace 17 años que trabajo acá, es como mi segunda casa. Clínica Pueyrredon es mi segunda familia. Me brindaron mucho apoyo los momentos más críticos de mi vida, desde la pérdida de un embarazo, y una pérdida familiar muy importante. Y también en los momentos buenos como el nacimiento de mi hija.

La clínica, junto a mis compañeras y obviamente el plantel de la jefatura, me apoyaron, me empujaron y me dieron mi espacio en su momento, entendieron la situación y yo me sentí muy contenida.

La verdad que no puedo tener otras palabras con respecto a la clínica. Siempre lo que necesité ellos me lo aportaron, ya sea en días o en circunstancias especiales. No tengo más que palabras de agradecimiento para la clínica.

Viviana Soria – Administración de Internación

Para mí es muy importante, desde el primer día que entré a trabajar acá la verdad que me sentí como en mi casa, por el trato que tuve de todas las personas.

Hace casi un año y medio que empecé a trabajar acá, primero como personal eventual y desde hace poco que soy parte del personal efectivo. Eso fue una gran alegría, así que todo bárbaro, no puedo decir otra cosa.

La posibilidad que me dieron acá me cambió totalmente la vida. Me siento una persona útil. Yo ya tengo 48 años y tener esta posibilidad fue grandioso.

Vengo a trabajar contenta, aprendo todos los días un montón y mis compañeros me ayudan. Estar acá en Internaciones me dio un montón de conocimientos que nunca me imaginé que lo podía llegar a tener.

Marisa Fersen – Jefa Control

Para mí es parte de mi vida, tenía solo 23 años cuando entré en el año 1986. Recién había venido a Mar del Plata, no conocía ni siquiera la ciudad, y me salió este trabajo, así que vine y aprendí todo desde el comienzo.

Clínica Pueyrredon es parte de mí vida, mis hijas nacieron acá. Me dio experiencia, conocimientos, responsabilidades.

Mirta Ballabriga – Jefa Admisión

Yo ingresé en el año 1997, venía de trabajos anteriores donde no podía estar más de 3 años. Se cumplían los 3 años y yo renunciaba porque había cosas que no me gustaban. Pero acá pasaban los años y me quedaba porque siempre trabajé tranquila, me dejaron ser. Y para mí pasó a ser el trabajo más lindo que tuve. En este trabajo conocí mucha gente linda, que te contiene en los momentos en que estas mal, operaciones que uno ha pasado aquí.

Uno siente que está es su casa, porque así te tratan, y así tratamos. Porque en distintos pasos que uno va teniendo en la clínica vamos tratando a nuestros compañeros como si fuéramos una gran familia. La clínica tiene un espacio muy importante en mi vida.

Macarena Apaza, enfermera de la guardia

Hace 10 años que estoy acá, desde que me recibí, y para mí es como mi segunda casa. Yo me siento en familia, lógicamente que hay roses y cosas propias del trabajo, pero me siento cómoda con todas las personas con las que trabajo.

Todo lo que es la parte laboral y lo que es la atención para mí es la mejor clínica, no solo porque trabajo acá, sino que antes de trabajar acá me atendía en la clínica. Definitivamente es como mi segunda casa.