Desde el Servicio de Gastroenterología y Endoscopia explican que la dispepsia hace referencia a trastornos en el tubo digestivo alto (esófago, estómago y primera parte del intestino que se llama duodeno). 

La dispepsia se presenta generalmente de dos formas: 

• Una en forma de dolor o malestar en el epigastrio (que es la boca del estómago).
• La otra se llama dispepsia tipo distrés, que es cuando la persona siente digestión lenta o que el alimento le queda mucho tiempo en la boca del estómago; o cuando siente que come mucho más de lo que realmente hizo; o cuando se produce una distención o hinchazón muy marcada después de comer, que a veces se asocia a eructos, náuseas y demás.

CAUSAS

Las causas más frecuentes de la dispepsia son dos: una es que haya un trastorno en la evacuación del estómago y la movilidad del intestino delgado. Esto se suele asociar a estrés, cansancio, nerviosismo, mal descanso nocturno. La otra causa de la dispepsia es una gastritis.

¿GASTRITIS O DISPEPSIA?

Muchos llaman gastritis al dolor y/o acidez en la boca del estómago, incluso a la dispepsia. Desde el punto de vista de gastroenterología y endoscopia se llama gastritis solamente a aquellas que se pueden evidenciar mediante endoscopia y/o histología (con biopsia). 

La gastritis es la inflamación microscópica de la mucosa o de las células de la mucosa del estómago, o una inflamación que es una gastropatía visible por endoscopia. A todo lo que se llama comúnmente gastritis, medicamente se lo llama dispepsia, tipo dolor o tipo distrés.

Helicobacter pylori

Hay un tipo de gastritis o gastropatía causada por la bacteria Helicobacter pylori. Esta bacteria está presente hasta en el 60% de los argentinos. Puede dar síntomas y malestares y es bastante característica, y en ese caso hay que tomar biopsias para ver si está presente la bacteria, y eventualmente hacer un tratamiento antibiótico adecuado.

Si bien es una bacteria que puede predisponer al cáncer gástrico, en nuestro medio no es así ya que es altísima la prevalencia de la bacteria en la población y no trae complicaciones. 

¿CUÁNDO CONSULTAR CON EL MÉDICO?

Si una persona tiene durante 3 meses síntomas estomacales recurrentes que ya le afectan la calidad de vida hay que consulta con un especialista, especialmente en los mayores de 45 años. Es importante que, en vez de acudir al uso crónico de protectores gástricos, primero se realice una evaluación para descartar, prevenir o evaluar lesiones neoplásicas, las cuales pueden predisponer al cáncer gástrico.