Estudios más importantes en Gastroenterología
La práctica más realizada es la video endoscopia alta, también conocida como endoscopia simple, que permite estudiar el esófago, el estómago y la primera parte del intestino que se llama duodeno. Generalmente sirve para evaluar síntomas y sospecha de reflujo, para ver si hay hernia de hiato, síntomas tipo dispepsia y/o dolor epigástrico que se le llama vulgarmente gastritis, y también para evaluar la posibilidad de complicación de úlceras y para evaluar la enfermedad celiaca.
El otro estudio que le sigue en frecuencia es la video colonoscopia, mediante la cual se estudia todo el intestino grueso y parte del intestino delgado.
Este estudio se realiza de forma rutinaria a todas las personas a partir de los 50 años. En el caso de tener antecedentes familiares de cáncer colorrectal el estudio se realiza a los 40 años.
La idea es detectar pólipos, que son como pequeñas verrugas que miden entre 5 y 15 milímetros, que son benignas y fáciles de sacar. Pero si no se sacan en 5, 10, 15 o 20 años se pueden convertir en un cáncer de colon, que suele presentarse alrededor de los 70 años. Entonces, para prevenir ese riesgo se hace el estudio a partir de los 50 años.
Por otro lado, también se hace la colangiografía retrograda endoscópica, que es un estudio endoscópico que tiene una visión especial lateral que nos permite evaluar la vía biliar y sacar piedras que pueda haber, también permite evaluar patologías del páncreas. Es un procedimiento que se hace principalmente en aquellas personas que tienen una enfermedad de litiasis que cae en la vía biliar o que se forma en la vía biliar.
Este es un procedimiento más complejo, de mayor riesgo, porque se trabaja dentro del páncreas. Este estudio se realiza solo a aquellos pacientes que tienen una enfermedad de la vía biliar.
Por otro lado, también se hacen estudios diagnósticos no terapéuticos del tubo digestivo como la endocápsula. Este es un método mediante el cual se toma una cápsula y va captando muchas fotos por segundo de todo el tracto digestivo, que permiten luego reconstruirlo mediante un software y ver si hay patologías o alguna alteración en el intestino delgado, que es lo que no se puede ver completamente de forma endoscópica.
También están a disposición los estudios de motilidad digestiva, como la manometría, que nos permite evaluar la motilidad y la función del esófago, de los esfínteres y del estómago. Estos estudios permiten evaluar reflujo mediante una ph-metria y trastornos de la motilidad o trastornos motores del esófago.
En Clínica Pueyrredon todos los estándares de calidad para realizar estos estudios están cumplidos.
Hoy en día la alta definición y la cromoendoscopia, que es la visualización especial del patrón mucoso, de la superficie de las lesiones, de los vasos submucosos, permiten detectar de forma más temprana y prevenir tumores que antes se escapaban a la prevención de patologías como el cáncer de colon.