Lumbalgia
La Lumbalgia, o dolor lumbar, o lumbago, es toda sensación dolorosa que se localice desde la mitad de la espalda aproximadamente, hasta la zona glútea. Se debe distinguir de la lumbociatalgia, o dolor ciático, que se define como todo dolor que parte de la región lumbar de la espalda y se irradia hacia una o ambas piernas, siguiendo el territorio de una raíz nerviosa especifica.
Desde el Servicio de Ortopedia y Traumatología explican que, a diferencia de lo que comúnmente se cree, la lumbalgia no es un padecimiento exclusivo de la vejez, sino que la gran mayoría de los casos se dan durante la etapa más activa de la vida de las personas, entre los 20 y los 60 años.
Se ha demostrado que el 80% de la población general ha padecido al menos alguna vez un episodio de dolor lumbar.
De estos, el 80% se autolimita en el transcurso de 4 a 8 semanas, pero también en el 80% de estos casos el dolor se repite en periodos variables de tiempo, dependiendo estos de cada individuo. Esto es lo que vulgarmente se conoce como la “regla de los 80”. Solo en un 10% de los casos esta patología se vuelve crónica.
CAUSAS DE LA LUMBALGIA
El 80% de las veces (continuando con la “regla de los 80”) la causa de la lumbalgia es de origen idiopática (palabra que en medicina se utiliza para describir enfermedades o padecimientos cuya causa es desconocida, no encontrándose lesión orgánica especifica en ningún estudio complementario), solo pudiendo el profesional observar en estudios por imágenes (radiografías, tomografías computadas y resonancia magnética) cambios degenerativos de las estructuras espinales acordes a la edad y contexto del paciente.
El 20% de los casos restantes es posible identificar el origen del dolor:
- ESTRUCTURAL (patología que afecta alguna de las estructuras de la columna vertebral, discos intervertebrales, facetas articulares, ligamentos o músculos).
- NEOPLÁSICO (en el contexto de una enfermedad oncológica especifica).
- INFLAMATORIO (cuando el dolor va asociado a una enfermedad de este grupo, siendo ejemplos la artritis reumatoidea o la espondilitis anquilosante).
- METABÓLICO (cuando el dolor es causado por enfermedades como la osteoporosis o la enfermedad de Paget, entre otras).
- Y por último y no menos importante, los dolores que denominamos como REFERIDOS (dolor que, originado en una estructura anatómica ajena a la columna vertebral, se manifiesta en la zona lumbar). Dentro de este último grupo se pueden incluir patologías renales, ginecológicas, vasculares o patologías traumatológicas, especialmente de la articulación de la cadera.
FACTORES DE RIESGO
En cuanto a los factores de riesgo para este padecimiento encontramos el sobrepeso u obesidad, el tabaquismo, la diabetes, el sedentarismo y los malos hábitos posturales, y ciertas actividades específicas.
DIAGNÓSTICO
Para el correcto diagnóstico de la causa del dolor lumbar es fundamental el examen físico completo por parte del profesional, siendo que ningún estudio (por mayor complejidad que este posea) sustituye a esta parte fundamental del acto médico. Luego, cada estudio complementario que se solicite (RX, TC, RNM o laboratorio) según criterio del profesional actuante, tiene su función específica, no siendo ninguno más importante o mejor que el resto de estos.
TRATAMIENTO
El tratamiento del dolor lumbar depende fundamentalmente de la causa, pero cabe destacar que puede requerir de un manejo interdisciplinario (medico clínico, traumatólogo, reumatólogo, endocrinólogo, medico fisiatra, kinesiólogo, terapista ocupacional, especialista en diagnóstico por imágenes). El mismo puede variar desde simple reposo y medicación, acompañado de terapia kinésica y modificación de hábitos de la vida cotidiana, hasta practicas intervencionistas (bloqueos facetarios, radiculares o peridurales) o tratamiento quirúrgico.
Para finalizar, desde el Servicio de Ortopedia y Traumatología destacan que la gran mayoría de los dolores lumbares se autolimitan sin necesidad de procedimientos complejos, que dicho dolor es muy variable y particular para cada individuo, y que es fundamental la correcta y completa evaluación por un profesional idóneo para una pronta recuperación y retorno a las actividades habituales de la vida cotidiana.