07/10 - Interés para la salud

¿Qué es el pterigeon?

El pterigeon es una de las patologías benignas más frecuentes junto con la pinguécula. El Dr. Jorge Saiñas, especialista en Oftalmología, explica que es un crecimiento conjuntival sobre la córnea, generalmente proveniente del sector nasal. Puede causar irritación y alteración en la visión.

 

CAUSAS 

Es un proceso degenerativo conjuntival, que se produce a partir de una patología benigna llamada Pinguécula. La exposición a irritantes ambientales y a las radiaciones ultravioletas es una de las causas más frecuente.

 

SÍNTOMAS

Los pacientes con pterigion o pinguécula acuden a la consulta porque presentan “una tela blanca en el ojo”.  

La pinguécula es una placa como de grasa blanquecina o amarillenta que en ocasiones se abulta, se irrita o produce ojo rojo con molestias locales.

 

Por su parte, el pterigion puede ser más asintomático en las fases iniciales, pero más severo ya que crece hacia la córnea con mayor tendencia a inflamarse. Puede afectar a la visión causando principalmente astigmatismo o progresar hasta llegar a la zona central.

 

Otros síntomas pueden ser: el lagrimeo, enrojecimiento ocular y sensación de cuerpo extraño.

 

DIAGNÓSTICO DE PTERIGEON

Se detecta ante un examen del ojo externo por el médico oftalmólogo en la lámpara de hendidura. En casos aislados es necesario realizar una biopsia para descartar lesiones tumorales malignas.

 

TRATAMIENTO MÉDICO

Evitar la exposición al sol e irritantes ambientales con el uso de lentes protectores con filtros ultravioletas.

Mantener el ojo lubricado con lágrimas artificiales apropiadas para cada caso y recetadas por su oftalmólogo. ¡¡¡Es muy importante NO AUTOMEDICARSE!!!

 

TRATAMIENTO QUIRÚRGICO

Consta de la extracción quirúrgica del mismo, con un autoinjerto de Limbo del mismo ojo o del ojo contralateral en contadas ocasiones.

 

La cirugía es ambulatoria con anestesia local, y con algunos cuidados en el post operatorio inmediato (ojo tapado por un día, y evitar frotar el ojo por dos semanas), y colocar un colirio antibiótico y antiinflamatorio según la evolución.

 

En los últimos años, con la aparición de los adhesivos tisulares, esta cirugía se realiza SIN PUNTOS DE SUTURA, lo que acorta el tiempo quirúrgico del mismo, y mejora ostensiblemente las molestias en el post operatorio, disminuyendo la posibilidad de recidivas.