Tipos de repelentes de insectos
Los repelentes de insectos son sustancias que, por su olor o naturaleza, ofrecen protección contra las picaduras de insectos. Existen diferentes tipos de repelentes, algunos más eficaces que otros, y también adaptados para cada edad.
Desde el Servicio de Dermatología explican que los repelentes son unas sustancias que, aplicadas sobre la piel y/o la ropa u otros tejidos, interfieren con los receptores químicos de los insectos impidiendo que fijen la localización exacta de la piel donde van a realizar la picadura. No matan al insecto pero lo mantienen alejado de la zona donde se ha aplicado el repelente.
Se aplican sobre las diversas zonas expuestas del cuerpo mediante diferentes sistemas: lociones, cremas, vaporizadores, roll-on, stickgel, toallitas impregnadas, etc., a través de los cuales los principios activos son depositados sobre la piel.
Es importante señalar que los repelentes de insectos previenen las picaduras de los insectos que pican (mosquitos, garrapatas, pulgas y moscas) pero no de los insectos con aguijón (abejas, avispones y avispas).
TIPOS DE REPELENTES
Repelentes químicos con DEET. La N,N-Dietil-meta-toluamida, conocida como DEET, es el ingrediente más habitual de los repelentes de insectos(marca conocida OFF). Se considera la mejor defensa contra los insectos que pican. Su protección abarca de dos a cinco horas, según la concentración del ingrediente DEET en el producto (dos a tres horas un 10% de concentración, cinco a seis horas un 25%; una concentración mayor del 30% no ofrece mayor eficacia ni protección).
La Asociación Americana de Pediatría recomienda que los repelentes que se usan en niños no deben contener más de un 30% de DEET. Tampoco se recomiendan estos repelentes de insectos para los niños menores de dos meses de edad. Así mismo, la Asociación Española de Pediatría indica que el DEET se debe evitar en lo posible en niños menores de dos años, priorizando el uso de mosquiteros y otros métodos no químicos.
Icaridina o picaridina. KBR 3023 (hidroxietil isobutil piperidina carboxilato) se ha demostrado tan eficaz como el DEET y sin la irritación asociada con este último. La protección abarca de las tres a las ocho horas, según su concentración. No se recomienda para los bebés menores de dos meses. Según la Asociación Española de Pediatría, al no haberse evaluado en menores de seis meses, la icaridina tampoco es recomendada por algunos organismos para niños menores de esa edad.
Repelentes con aceites esenciales de plantas (citronela, cedro, eucalipto, soja). Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades han señalado que estos aceites son tan eficaces como el DEET o la icaridina en repelentes que contienen aceites de eucalipto, de limón o de soja al 2%. Eso sí, el tiempo de protección es inferior a las dos horas, por lo que hay que reponerlos con mucha frecuencia. No se recomienda para bebés menores de dos meses. El citriodiol o eucaliptus citriodora no se recomienda en menores de dos años (puede producir irritación ocular).
Repelentes químicos con permetrina. La permetrina o piretrina es una sustancia química sintética que se utiliza mundialmente como insecticida y acaricida, así como repelente de insectos. No deben aplicarse en la piel, solo sobre la ropa (y el producto permanece incluso después de los lavados). A diferencia de la icaridina y de los aceites de plantas, se ha demostrado la eficacia para matar las garrapatas al contacto. No se recomienda para niños menores de dos meses de edad.
IR3535 (3-N-butil-n-acetil aminopropionato de etilo), un repelente de insectos sintético activo contra los mosquitos, las garrapatas y las moscas que pican. Los estudios han demostrado una protección muy variable según la concentración del producto y la especie de mosquito contra la que actúa (de una a seis horas). Contra el mosquito común, su eficacia es de unas seis horas. La toxicidad de este repelente es mínima, aunque es un irritante ocular y no se debe usar en niños menores de un año. A partir de los doce meses el producto con concentración menor del 20% se puede aplicar en niños.
REPELENTES INEFICACES
- El ajo o la vitamina B1 tomados por boca.
- Los dispositivos ultrasónicos que emiten ondas sonoras diseñados para alejar a los insectos.
- Las casas para pájaros o murciélagos.
- Dispositivos para el jardín que “electrocutan” insectos (de hecho, pueden atraer insectos a su jardín).
- Brazaletes que contienen repelentes químicos.